Tras casi un mes sin publicar entrada, estoy de nuevo aquí. Este último mes se podría decir que ha sido muy festivo en la ciudad de Valencia y muy cansado para mi.
Aunque empezaron el 15 de Marzo, llevábamos muchas noches trasnochando, preparando playbacks, disfraces y sorpresas.
El primer fin de semana fallero fue el sábado 2 de Marzo, día de disfraces. Aunque solemos tender a disfrazarnos de cosas rápidas hecho a última hora, este año nos decidimos mucho antes y nos quedó apañaó. Pop años 80, se supone. Mucho leopardo, pelo cardado y maquillaje a tutiplen.
El primer fin de semana fallero fue el sábado 2 de Marzo, día de disfraces. Aunque solemos tender a disfrazarnos de cosas rápidas hecho a última hora, este año nos decidimos mucho antes y nos quedó apañaó. Pop años 80, se supone. Mucho leopardo, pelo cardado y maquillaje a tutiplen.
El siguiente fin de semana, y tras bastantes ensayos, bailamos el nachiné (así bautizamos la canción Aaja Nachle Song tras escucharla cientos de veces). Pese a las noches sin dormir, discusiones de vestuario, nervios y que ya tenemos cierta edad, no lo hicimos mal del todo. jajajja
Daban su verdadero comienzo las fallas en nuestra comisión con el autobús fallero, que ya podríamos decir que se ha convertido en tradición. Visita a las fallas de especial a lo largo de la noche, que aún sin terminar de montar ya muestran como serán. No sin nuestro atuendo particular, que nos gusta más un complemento que a la Lomana.
Y es que desde que hace ya 5 años decidimos ser falleros, esta semana es distinta.
Antes de serlo, las fiestas transcurrían de un lugar para otro viendo fallas, castillos,... Pero cuando formas parte de una falla todo cambia. Pasas más horas que tiene el día dentro de ella intentando no perderte nada. De buena mañana chocolatá, peínate vete al pasacalles, a por el premio, a la ofrenda, a la cena, a la discomovil,.. Acuéstate unas horitas y vuelta a empezar. Así durante 5 días.
Con esto, parece que sea un sacrificio ser fallera, que un poco lo es, pero tiene que ser que somos muy masocas en Valencia y nos gusta el sufrimiento jejeje
El 19 de Marzo acababan con la cremá de los monumentos falleros, con el brindis por otro año fallero y con la alegría a la par de cansancio de haber vivido una semana muy especial.
No me voy a extender más, que información sobre fallas hay en muchas webs, y mi visión de las fiestas de mi ciudad es muy poco crítica.
Paso al día 21. Si, si, al 21 de Marzo. Tan solo 2 días más tarde empezaban a sonar los tambores de la Semana Santa Marinera, en la cual también participo activamente desde que era pequeña.
Se entiende con ello que no haya tenido tiempo de sentarme frente al ordenador ni un segundo.
Cambiaba el pasacalles por las procesiones, el vestido del perchero por las túnicas, las peinetas por el capirote,... Y otra semana más sin parar.
Antes de serlo, las fiestas transcurrían de un lugar para otro viendo fallas, castillos,... Pero cuando formas parte de una falla todo cambia. Pasas más horas que tiene el día dentro de ella intentando no perderte nada. De buena mañana chocolatá, peínate vete al pasacalles, a por el premio, a la ofrenda, a la cena, a la discomovil,.. Acuéstate unas horitas y vuelta a empezar. Así durante 5 días.
Con esto, parece que sea un sacrificio ser fallera, que un poco lo es, pero tiene que ser que somos muy masocas en Valencia y nos gusta el sufrimiento jejeje
El 19 de Marzo acababan con la cremá de los monumentos falleros, con el brindis por otro año fallero y con la alegría a la par de cansancio de haber vivido una semana muy especial.
No me voy a extender más, que información sobre fallas hay en muchas webs, y mi visión de las fiestas de mi ciudad es muy poco crítica.
Paso al día 21. Si, si, al 21 de Marzo. Tan solo 2 días más tarde empezaban a sonar los tambores de la Semana Santa Marinera, en la cual también participo activamente desde que era pequeña.
Se entiende con ello que no haya tenido tiempo de sentarme frente al ordenador ni un segundo.
Cambiaba el pasacalles por las procesiones, el vestido del perchero por las túnicas, las peinetas por el capirote,... Y otra semana más sin parar.
Pese a todo, ahora que puedo sentarme me da pena tener que esperar de nuevo un año.
Pero un año no es nada. Parece que fue ayer cuando nació el más peque de la familia política, y ya hoy hace un año. Felicidades!!!
(Que post más aprovechado! Dos fiestas y un cumpleaños! ;) )
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